La semana pasada la Secretaría de Educación Pública (SEP) presentó la “Estrategia de Política Educativa Nacional: Competencias para el México que queremos”, que puede ser vista como un paso hacia adelante en la Reforma Integral de la Educación Básica (RIEB). Es, de hecho, un esquema educativo novedoso cuyo eje estratégico es la edificación de un espacio virtual para que los maestros de primaria y secundaria participen en foros, tengan acceso a materiales educativos y comenten sus experiencias pedagógicas en la red.
Este programa se conformó desde el 2008, bajo cinco políticas públicas. En primera instancia, se integró como la base de una política curricular que en el programa sectorial 2007-2012 se le denominó articulación de la educación básica, es decir, secuencias didácticas desde preescolar, pasando por primaria, hasta la secundaria.
Los mayores esfuerzos de estas secuencias didácticas se centran en las habilidades lectoras de los alumnos, pensamiento matemático, solución de problemas, análisis y compresión crítica del entorno, a partir del conocimiento científico. En síntesis: los ámbitos que inciden en el desarrollo de los estudiantes en cuanto a competencias, habilidades y los nuevos rasgos de la ciudadanía, de cara a los retos y desafíos que implica el Siglo XXI.
ENFOQUES PEDAGÓGICOS
La segunda estrategia está vinculada a una novedosa generación de materiales didácticos educativos. Desde los libros de texto gratuitos, las bibliotecas escolares y la disposición de instrumentos multimedia de aprendizaje. La RIEB considera también el desarrollo de estándares educativos tanto curriculares, desempeño de los maestros y gestión escolar.
Si se considera que los instrumentos de difusión y generación de conocimientos son una oportunidad para elevar la calidad de la educación en el país, en esta nueva estrategia educativa, resultará clave la participación de prestigiadas instituciones de educación superior.
La capacitación de los maestros, por ejemplo, en el área de matemáticas, quedará en manos del Centro de Investigaciones de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN); ciencias, a cargo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); en español recaerá sobre Universidad Pedagógica Nacional (UPN), mientras que en el fortalecimiento del pensamiento abstracto, la capacitación será del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM).
La “Estrategia de Política Educativa Nacional: Competencias para el México que queremos” iniciará en enero próximo. De hecho desde 2008 inició la incorporación de las habilidades en el manejo de las tecnologías. Cerca de 450 mil maestros, directivos y asesores técnico-pedagógicos han empleado el uso de las tecnologías de la información y de la comunicación.
La SEP se ha impuesto un techo de 700 mil profesores que serán incorporados en el uso de esas tecnologías, pero sin duda alguna, la línea de difusión más importante será la guía para los alumnos de segundo y tercero de secundaria y docentes, en especial porque serán los estudiantes que serán evaluados en la evaluación PISA 2012.
MAESTROS Y CAPACITACIÓN
Hoy en día, se puede decir que en materia de evaluación en el país se han registrado avances, como también en la renovación de materiales didácticos y profesionalización docente, no obstante los recortes en las inversiones educativas en todos los niveles educativos, aplicados por el gobierno federal en los últimos dos años.
Es alentador, pues, la participación e incorporación, de las instituciones de educación superior más prestigiadas del país para redoblar esfuerzos en una educación sustentada en las competencias y capacidades del estudiantado mexicano acordes al Siglo XXI, por encima del modelo memorístico. Los académicos del IPN, la UNAM, la UPN y del Tec de Monterrey, sin duda alguna, aportarán sus conocimientos para enriquecer la formación y capacitación del magisterio nacional, que por su parte, en todo momento, han externado su disposición a su actualización permanente para mejor la calidad del aprendizaje de los alumnos.
Alrededor del país.
¿Gobiernos vs. Universidades Públicas?—Sin duda no es la regla, pero si hacemos un repaso a lo que viene sucediendo en la Universidad de Guadalajara (UdeG), parecería la excepción ante un conflicto que ha trascendido los contornos de Jalisco y ha puesto sobre la mesa la necesidad de garantizar la entrega de recursos públicos a las Instituciones de Educación Superior en México.
Ya no solo hablamos, entonces, de la insuficiencia de recursos públicos que autorizan los poderes Ejecutivo y Legislativo y que afectan la labor sustantiva de las IES, sino de una negativa, lisa y llana, a entregar recursos públicos que les corresponden por ley.
Este es el marco de referencia bajo el cual ocho rectores de Universidades Públicas manifestaron su apoyo a la UdeG, ante la exigencia que ha hecho ésta última para la entrega de recursos públicos por parte del gobierno de Jalisco. Entre los rectores que expresaron su solidaridad, están: José Narro Robles, rector de la UNAM, así como sus colegas rectores de las Universidad de Coahuila, Mario Alberto Ochoa Rivera; de Hidalgo, Humberto Veras Godoy; de Morelos, Fernando de Jesús Bilbao Marcos; Nayarit, Juan López Salazar; de San Nicolás de Hidalgo, Michoacán, Silvia Figueroa Zamudio; de Sinaloa, Víctor Antonio Corrales, y de Zacatecas, Francisco Javier Domínguez.
Ante Marco Antonio Cortés Guardado, Rector de la UdeG y Rafael López Castañares, secretario General de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), Narro Robles patentizó la petición de los rectores, al invitar respetuosamente al gobierno estatal y al Jefe del Ejecutivo de Jalisco “para que haya una conducción por el camino de la ley y no se escatimen los recursos acordados en los convenios respectivos”.
Narro Robles aprovechó la oportunidad para dirigirse al Congreso de la Unión (instancia que podría contribuir a la solución, pues ella aprueba en última instancia los recursos a las IES) y solicitar que las universidades públicas “tengan mucha más certidumbre presupuestal”.
El rector de la “Máxima Casa de Estudios”, dejo en claro los riesgos: “No podemos hacer la planeación con ejercicios anuales. Tampoco podemos estar sujetos a que este año aumentemos la matrícula y el próximo nos disminuyan los recursos”. E igualmente: “si no se entregan recursos, seguramente indicadores como el de cobertura en educación superior, que hoy sólo se refleja en la atención de tres de cada 10 estudiantes que solicitan un lugar, irán a la baja. Parte de los fondos de las universidades públicas son justamente para tratar de revertir esos niveles”.
En forma por demás crítica, el rector de la UdeG, Marco Antonio Cortés, advirtió que la problemática que enfrenta la universidad jalisciense “es un problema de legalidad, pues no se cumplen los convenios previamente signados”. Y de hecho reiteró, como lo han hecho a través de la prensa, que la situación económica de la universidad “compromete su viabilidad e imposibilita cumplir con compromisos como el aguinaldo del personal académico y administrativo”, en lo que resta del 2010.
Así las cosas, la discusión sobre las políticas de asignación presupuestal al rubro educativo seguirán en la mesa de debate.
emilio.zebadua@hotmail.com
Este programa se conformó desde el 2008, bajo cinco políticas públicas. En primera instancia, se integró como la base de una política curricular que en el programa sectorial 2007-2012 se le denominó articulación de la educación básica, es decir, secuencias didácticas desde preescolar, pasando por primaria, hasta la secundaria.
Los mayores esfuerzos de estas secuencias didácticas se centran en las habilidades lectoras de los alumnos, pensamiento matemático, solución de problemas, análisis y compresión crítica del entorno, a partir del conocimiento científico. En síntesis: los ámbitos que inciden en el desarrollo de los estudiantes en cuanto a competencias, habilidades y los nuevos rasgos de la ciudadanía, de cara a los retos y desafíos que implica el Siglo XXI.
ENFOQUES PEDAGÓGICOS
La segunda estrategia está vinculada a una novedosa generación de materiales didácticos educativos. Desde los libros de texto gratuitos, las bibliotecas escolares y la disposición de instrumentos multimedia de aprendizaje. La RIEB considera también el desarrollo de estándares educativos tanto curriculares, desempeño de los maestros y gestión escolar.
Si se considera que los instrumentos de difusión y generación de conocimientos son una oportunidad para elevar la calidad de la educación en el país, en esta nueva estrategia educativa, resultará clave la participación de prestigiadas instituciones de educación superior.
La capacitación de los maestros, por ejemplo, en el área de matemáticas, quedará en manos del Centro de Investigaciones de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN); ciencias, a cargo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); en español recaerá sobre Universidad Pedagógica Nacional (UPN), mientras que en el fortalecimiento del pensamiento abstracto, la capacitación será del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM).
La “Estrategia de Política Educativa Nacional: Competencias para el México que queremos” iniciará en enero próximo. De hecho desde 2008 inició la incorporación de las habilidades en el manejo de las tecnologías. Cerca de 450 mil maestros, directivos y asesores técnico-pedagógicos han empleado el uso de las tecnologías de la información y de la comunicación.
La SEP se ha impuesto un techo de 700 mil profesores que serán incorporados en el uso de esas tecnologías, pero sin duda alguna, la línea de difusión más importante será la guía para los alumnos de segundo y tercero de secundaria y docentes, en especial porque serán los estudiantes que serán evaluados en la evaluación PISA 2012.
MAESTROS Y CAPACITACIÓN
Hoy en día, se puede decir que en materia de evaluación en el país se han registrado avances, como también en la renovación de materiales didácticos y profesionalización docente, no obstante los recortes en las inversiones educativas en todos los niveles educativos, aplicados por el gobierno federal en los últimos dos años.
Es alentador, pues, la participación e incorporación, de las instituciones de educación superior más prestigiadas del país para redoblar esfuerzos en una educación sustentada en las competencias y capacidades del estudiantado mexicano acordes al Siglo XXI, por encima del modelo memorístico. Los académicos del IPN, la UNAM, la UPN y del Tec de Monterrey, sin duda alguna, aportarán sus conocimientos para enriquecer la formación y capacitación del magisterio nacional, que por su parte, en todo momento, han externado su disposición a su actualización permanente para mejor la calidad del aprendizaje de los alumnos.
Alrededor del país.
¿Gobiernos vs. Universidades Públicas?—Sin duda no es la regla, pero si hacemos un repaso a lo que viene sucediendo en la Universidad de Guadalajara (UdeG), parecería la excepción ante un conflicto que ha trascendido los contornos de Jalisco y ha puesto sobre la mesa la necesidad de garantizar la entrega de recursos públicos a las Instituciones de Educación Superior en México.
Ya no solo hablamos, entonces, de la insuficiencia de recursos públicos que autorizan los poderes Ejecutivo y Legislativo y que afectan la labor sustantiva de las IES, sino de una negativa, lisa y llana, a entregar recursos públicos que les corresponden por ley.
Este es el marco de referencia bajo el cual ocho rectores de Universidades Públicas manifestaron su apoyo a la UdeG, ante la exigencia que ha hecho ésta última para la entrega de recursos públicos por parte del gobierno de Jalisco. Entre los rectores que expresaron su solidaridad, están: José Narro Robles, rector de la UNAM, así como sus colegas rectores de las Universidad de Coahuila, Mario Alberto Ochoa Rivera; de Hidalgo, Humberto Veras Godoy; de Morelos, Fernando de Jesús Bilbao Marcos; Nayarit, Juan López Salazar; de San Nicolás de Hidalgo, Michoacán, Silvia Figueroa Zamudio; de Sinaloa, Víctor Antonio Corrales, y de Zacatecas, Francisco Javier Domínguez.
Ante Marco Antonio Cortés Guardado, Rector de la UdeG y Rafael López Castañares, secretario General de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), Narro Robles patentizó la petición de los rectores, al invitar respetuosamente al gobierno estatal y al Jefe del Ejecutivo de Jalisco “para que haya una conducción por el camino de la ley y no se escatimen los recursos acordados en los convenios respectivos”.
Narro Robles aprovechó la oportunidad para dirigirse al Congreso de la Unión (instancia que podría contribuir a la solución, pues ella aprueba en última instancia los recursos a las IES) y solicitar que las universidades públicas “tengan mucha más certidumbre presupuestal”.
El rector de la “Máxima Casa de Estudios”, dejo en claro los riesgos: “No podemos hacer la planeación con ejercicios anuales. Tampoco podemos estar sujetos a que este año aumentemos la matrícula y el próximo nos disminuyan los recursos”. E igualmente: “si no se entregan recursos, seguramente indicadores como el de cobertura en educación superior, que hoy sólo se refleja en la atención de tres de cada 10 estudiantes que solicitan un lugar, irán a la baja. Parte de los fondos de las universidades públicas son justamente para tratar de revertir esos niveles”.
En forma por demás crítica, el rector de la UdeG, Marco Antonio Cortés, advirtió que la problemática que enfrenta la universidad jalisciense “es un problema de legalidad, pues no se cumplen los convenios previamente signados”. Y de hecho reiteró, como lo han hecho a través de la prensa, que la situación económica de la universidad “compromete su viabilidad e imposibilita cumplir con compromisos como el aguinaldo del personal académico y administrativo”, en lo que resta del 2010.
Así las cosas, la discusión sobre las políticas de asignación presupuestal al rubro educativo seguirán en la mesa de debate.
emilio.zebadua@hotmail.com